ATACAMA Y COPIAPÓ EN EL INICIO DE LA HISTORIA DE CHILE

09.08.2011 00:07

ATACAMA Y COPIAPÓ EN EL INICIO DE LA HISTORIA DE CHILE


RESUMEN.


Postulamos que para la generación de la historia como ciencia, debemos tener la rigurosidad de no considerar historia solamente el pasado, ya que la historia como lo planteará Le Goff, es más bien la ciencia del cambio de las sociedades, por lo que en estricto rigor historia serán los hitos que generan procesos de cambio y desarrollo. Sobre esta base proponemos nuestra hipótesis de trabajo, que es que los pueblos precolombinos de la región de Atacama y Coquimbo, en específico los Diaguitas, presentan un mayor avance cultural de la etapa prehispana. Como así también que la bajo estos presupuestos teóricos de la historia, esta comenzaría en el Valle de Copiapó, el 26 de octubre de 1540.


INTRODUCCIÓN.


La propuesta de este ensayo viene a ser un resumen de mi Tesis Doctoral, en él postulamos que los pueblo prehispánicos que viven en la actual región de Atacama y también Coquimbo son los más desarrollados culturalmente hablando en comparación al resto de la etnias nacionales, y sobre todo manejamos como hipótesis de trabajo que la historia de Chile de acuerdo a criterios históricos tiene su origen en la región de Atacama y en el Valle de Copiapó. Ubicamos el comienzo de la historia no con la llegada de Diego de Almagro en 1536, sino que con la Toma de posesión de Chile, realizada por Valdivia en 1540, esto debido a que pensamos que la ciencia histórica puede y debe priorizar aquello hitos que son trascendentes y que generan procesos de desarrollo, social, político, económicos, científico, jurídico, etc. En definitiva a los hitos que generan el acto cultural. Ellos son los llamados a dar valor a la historia. Es así como pensamos existe en el desarrollo de la historia un suceder que debe ser estudiado desde la óptica del conocer ( o ciencia histórica) en su doble dimensión Tiempo y Espacio , que de manera más específica lo dividimos como : 1. Los Hitos y Los Procesos. 2. Contexto ambiental.


Sin duda, que hitos y procesos los relacionamos más íntimamente, con la dimensión temporal o cronológica. Ricardo Krebs, nos dirá al respecto lo siguiente: " La cronología es inherente a la historia". Gracias a lo temporal podemos conocer y comprende los fenómenos y hechos ocurridos a la mujer y al hombre de manera sistemática y secuencial.


El hito puede ser asimilado a hecho histórico puntual, también podemos entender que son los grandes momentos o marcas indelebles en la marcha de la humanidad, los hitos dan origen y fin a los procesos. Por proceso entendemos el desarrollo a través del tiempo de una sucesión de hechos y acontecimientos que marcan nuevos rumbos en el avance de la humanidad, teniendo como protagonista a la mujer y el hombre, sujetos históricos de la sociedad.


La segunda dimensión, o contexto ambiental, es comprender que la historia se desarrolla en un espacio geográfico determinado, esta dimensión espacial y/o territorial que tiene la historia nos permite la localización del desarrollo de los fenómenos y hechos históricos en un medio geográfico preciso. Ricardo Vera Tornell, en una suerte de metáfora concibió el desarrollo histórico como una gran obra teatral, donde la dimensión espacial cumplía el papel de ser el escenario, donde se desenvuelve la trama y los actores


No obstante lo anterior debemos si aceptar la propuesta de la corriente cultural y de la moderna historiografía de que todo es historia. Nuestro principal observación a esta posición es que aceptando lo anterior, nos parece como expusimos anteriormente que hay hechos o hitos más relevantes que otros, esto de ninguna manera busca revalidar la vieja historia política que destaca nombre de reyes o políticos, y una interminable sucesión de batallas. Tuñon de Lara, nos ha dicho que la Historia tradicional evoca en muchas mentes las horas agridulces de la infancia en las que era imprescindible aprenderse de memoria la lista tan larga como incomprensible de reyes, o el relato de guerras cuya significación queda fuera de nuestro alcance.


Similar concepción plantea Eduardo Galeano, con relación a la historia tradicional en América Latina: " La Historia oficial latinoamericana se reduce a un desfile militar de próceres con uniformes recién salidos de la tintorería " .


Dado que no pretendemos realizar una historia tradicional sino que entender la Historia como generadora de conciencia e identidad, es que presentamos este ensayo para la discusión, critica y como no a la corrección de los errores que en él existan. Pero, adoptamos una postura teórica con relación a la Historia no basta ser pasado para ser historia, sino que hay que ser hito generador de proceso, y también adoptamos una postura reivindicativa con respecto al papel de la historia en la sociedad, ella genera identidad y es absolutamente esencial para cualquier plan o proyecto que busque la mejora de vida de las personas, sin ella no hay futuro consensual y seleccionado, la historia en último caso nos permite no ser una masa corderil, y poder ser protagonista en la construcción de nuestro destino.


Finalmente decir que de manera muy resumida nos adentrarnos en dos ideas: La importancia de la etnia Diaguita y el comienzo de la historia de Chile, todo ello ocurrido en nuestra región y con gran desconocimiento real y teórico sobre ello. 

 

LOS DIAGUITAS DE LOS VALLES TRANSVERSALES

 

Los denominados pueblos prehispánicos chilenos, son todos aquellos pueblos que vivían y se desarrollaban en lo que hoy es nuestro país, con una cronología aproximada desde el siglo XII d. C., en adelante. La mayoría de estos pueblos tenían distintas especializaciones en cuanto al trabajo, y por supuesto al desarrollo socio económico y cultural. Al llegar al siglo XV de nuestra era, postulamos como una de las hipótesis en nuestro trabajo de investigación que los Diaguitas eran el pueblo más avanzado del universo prehispánico chileno.


Su origen se remonta a los primeros pobladores que llegan al continente en este caso el horizonte paleoindio, para luego evolucionar a partir de los grupos humanos de : Huentelauquen, El Molle y Las Animas, ellos serán antecesores y la base del pueblo Diaguita.

 

HUENTELAUQUEN

Su característica principal, son los instrumentos líticos de 3 a 7 caras, que son productos humanos

Pueblo o Cultura Desarrollo cultural Cronología Aproximada

EL MOLLE

AGROALFARERO TEMPRANO: Principios de laagricultura ganadería y una cerámica muy poco refinada

0 a 800 d.C.

LAS ANIMAS, en sus etapas I,II,III y IV

AGROALFARERO MEDIO: Importante Desarrollo agroganadero, cerámica más pulimentada y con variación de colores

905 a 1100 d.C.

DIAGUITAS

AGROALFARERO TARDIO: Importante desarrollo político y socioeconómico, cerámica pulimentada

1200 a 1650 d.C.


Actualmente los arqueólogos Miguel Cervellino, Hans Niemayer y Gastón Castillo, han propuesto que para la zona comprendida en el valle del río Copiapó, la aparición de la llamada Cultura Copiapó que se ubicaría cronológicamente entre Animas y Diaguitas, con una característica cultural definida, cerámica negro sobre rojo .


Nosotros no compartimos plenamente esta propuesta ya que pensamos que una evolución histórica y cultural tan similar en cuatro valles, incluido Copiapó, donde destacan similitudes y en algunos casos completa coincidencia en lo religioso, en la organización socio – política, la utilización agrícolas de las tierras, manejo similar del pastoreo, vestimentas y uso de los tejidos de forma similar, empleo y trabajo idéntico en los minerales, y orígenes evolutivos comunes, con una cronología aproximada desde el año cero de nuestra era, de ninguna manera es indicativo de diferencias, sino que más bien a una visión critica solo encontramos equivalencias. Por lo anterior, nos parece que sus disimilitudes no son profundas y marcadas como para postular que son culturas diferentes.


Adentrándonos en la vida de los Diaguitas podemos decir que este pueblo tenían una cerámica rica y variada, donde destacan sus trabajos zoo y antropomorfos, escudillas, jarrones patos, aríbalos, jarro zapato, y también algunos figuras más exóticas como el packcha, en cuanto a sus colores variaron entre el negro y rojo ( ambos en base a oxido de hierro) y blanco, a base de caolín (arcilla pura), luego se derivo a un color un tanto amarillento. Sus diseños como los triángulos antepuestos por el vertice reticulados y guardas en cuadriculado o tablero de ajedrez aparecen profusamente .


Políticamente se organizaron en Señoríos duales al modo de la división Andina en dos mitades, un señoríos en el nacimiento de valle y otro en la desembocadura. Fueron agricultores y ganaderos, cultivaron papa, maíz, zapallo, quinoa, el regadío fue a través de terrazas, acequias y canales y la tierra era comunitaria. Del ganado extrajeron carne y lana. Trabajaron los metales y fueron hábiles metalurgistas destacando en este aspecto el centro de fundición Viña del Cerro. Presentan también similares estructuras urbanas en todos los valles, etc. Otro rasgo demostrable de este pueblo fue e papel relevante que cumple la mujer, participando incluso en asambleas políticas y como lo documenta el cronista Pedro Mariño de Lobera, en la actuación de Lainacacha, en salvar la vida de Pedro de Miranda y Alonso de Monroy. Este Hecho también es ratificado por el cronista Antonio de Herrera que llama a Lainacacha, Cacica.


Todo ello nos lleva a postular que los Diaguitas, son el pueblo culturalmente más avanzado del conjunto de pueblos precolombinos chilenos, y son ellos los que recibirían el primer y mayor impacto de la conquista (1540 d.C.), y con ello se dará inicio a la historia nacional.